sábado, 16 de abril de 2011

El día de la marmota


No me resisto a contaros una de mis tonterías.com

Ocurrió hace poco. Uno de esos días en los que acudes a una jornada, reunión, encuentro o como queramos llamar al hecho de que un conjunto de personas aparquen sus quehaceres cotidianos y decidan formar parte de un acto público.

A lo que voy…

Yo ya sabía de qué iba la cosa, acudo todos los años, de manera que opté por quedarme de pie en la parte de atrás –mejor perspectiva y mayor posibilidad de escapar si aquello se ponía pesado.

Curioso, casi todas éramos mujeres: ¿más sociables?, ¿menos exigentes?, ¿había fútbol?... Vaya usted a saber... El caso es que andaba yo mirando cómo colocaban el micrófono en la mesa de los ponentes (y las “ponentas”, que diría doña María Teresa Fernández de la Vega) cuando se me acerca un vecino, cámara de televisión al hombro, me planta dos besos ─de los que no echan raíces─ y añade en tono despectivo: “El día de la marmota”. Yo no sabía si aquello tenía que ver con una de esas expresiones tontas que te suelta la gente para llamar la atención -y que luego ni te explican- o, por el contrario, es que la persona quería dejar claro que estaba allí porque no tenía más cojones que estar, pero que su otro yo –el que usamos para andar en chanclas- quedaba por encima de toda repetida, monótona y cansina parafernalia. El caso es que, aquella frase me dejó un mal rollito interno: "¿Nos ha llamado marmotas?"... A partir de ese momento, no es que yo viviera sin vivir en mí, pero casi.

Terminado el acto, me fui con la amarga sensación de que todavía existen hombres que, en presencia de un colectivo femenino, lo único que ven es un rebaño de cabras con tetas.

Se lo cuento a mi hija y se echa a reír como si aquello fuera un chiste: "Mamá -me dice- El Día de la Marmota es una película. En realidad se llama Atrapado en el Tiempo, y el protagonista tiene la impresión de que siempre le ocurren las mismas cosas”.


Busqué información sobre esa película…

“El meteorólogo de una estación de televisión de Pittsburgh, acompañado de su nueva redactora Rita, acude con su técnico de grabación a Punxsutawney, una pequeña población de Pennsylvania en la que cada 2 de febrero, en pleno invierno, el comportamiento de una marmota en la fiesta local determina cuánto tiempo queda hasta que termine la estación fría, el famoso Día de la marmota. A primera vista vemos que Phil es un hombre frustrado en sus ambiciones y aburrido con su trabajo, y en su arrogancia piensa que su carrera profesional no avanza todo lo rápido que merecería. Realizadas las tomas de la marmota y transmitidas por televisión, el pequeño grupo se dispone a regresar a Pittsburgh para poder cubrir el noticiario de las 5. Sin embargo, una tormenta de nieve les obliga a pasar la noche en el pueblo. A la mañana siguiente suena el despertador con la misma música del día anterior («I Got You Babbe» de Sonny & Cheer). A medida que se viste y acude al comedor para desayunar, el incrédulo Phil se va dando cuenta de que está viviendo de nuevo el día de la marmota. Tras repetirse varias veces esta situación, Phil comienza a pensar que no tiene sentido vivir día tras día lo mismo, por lo que decide cambiar drásticamente los acontecimientos”.

Uy, qué ignorante soy…

Ahora lo que me preocupa no es que me llamen marmota, sino toparme con algún que otro reportero (masculino y singular), que los días se me vuelvan monótonos o quedarme sin tetas.

11 comentarios:

Tempus fugit dijo...

Muy buena la película... para reflexionar. Hay días, no obstante, que uno tiene esa sensación cuando suena el despertador.


besos

Juan Manuel Rodríguez de Sousa dijo...

A veces se le puede dar la vuelta a la tortilla a una historia, de todas formas, sí, hay hombres que piensan lo que tú pensaste.

Tengo que ver esa película, me la pongo en la lista.

Saludos,
Juanma

Paseo por las nubes dijo...

Hola Luis, hola Juanma, afortunada que soy al teneros por aquí; dos hombres de buena talla y a los que, por lo que veo, les gusta el cine (como a mí).
Que sean tres de palomitas...

Ardilla Roja dijo...

Hola, Merce:

He visto la película dos veces. La primera no me gustó, estaría yo poco receptiva, no sé; la segunda le puse interés y es bastante curiosa. Vivir siempre la misma situación puede ser desesperante; pero al mismo tiempo, el hecho de saber qué va a suceder te da opción a cambiar el desarrollo de las cosas, o por lo menos intentarlo ;)

Quedarme sin tetas no me molaría nada jajaja

Un besito

Paseo por las nubes dijo...

Hola, Ardi:
Yo no he visto la peli, pero el mero hecho de tratar un tema como ese, me da para pensar: ¿qué pasaría si...? Y, la verdad, no quiero vivir el mismo día dos veces, tendría la sensación de que estoy estancada, y eso no me gustaría.

Yo tampoco quiero perder mis tetas porque me gusta ser mujer. Pero vamos, que si fuera hombre, tampoco quisiera dejar de serlo (cuestión de mirar el lado positivo de todo lo que nos ocurre).

Besillos, mil.

Neogeminis Mónica Frau dijo...

jejeje sabía de la película y el curioso título, pero desconocía los pormenores del argumento. Ahora me queda mucho más claro y ajustado el comentario de tu vecino!
Un abrazo.

Juan Manuel Rodríguez de Sousa dijo...

Ya he visto la peli, Merce! Y salvo algunas momentos un poco descollantes, y mal rodados propio del cine de finales de los ochenta y principios de los noventa, la historia está realmente bien. Sobre todo por la gran idea, te hace que pensar, mucho. Para mí es una crítica al mundo actual.

En fin, ha merecido la pena verla.
Palomitas para todos!

Juan Manuel Rodríguez de Sousa dijo...

Ya he visto la peli, Merce! Y salvo algunas momentos un poco descollantes, y mal rodados propio del cine de finales de los ochenta y principios de los noventa, la historia está realmente bien. Sobre todo por la gran idea, te hace que pensar, mucho. Para mí es una crítica al mundo actual.

En fin, ha merecido la pena verla.
Palomitas para todos!

Paseo por las nubes dijo...

Muy bien, Juanma. Me alegro de que te haya gustado y te haga reflexionar. La verdad es que, como dijo alguien, "todos los días hay que buscar la perla entre la ropa sucia" así rompemos con la monotonía.

Besillos nuevos

Paseo por las nubes dijo...

Ay, Neo, que no te he saludado, perdona.
Ya ves que, a veces, por desconocimiento o ignorancia podemos dar un giro distinto a lo que dicen otros. Menos mal que yo siempre que tengo dudas lo comento con alguien (en este caso con mi hija) y todo adquiere una perspectiva distinta.

besillos, vecina.

VivisPato dijo...

No sabia que existia esta pelicula.. pero seguro la vere.
Aqui donde vivo eso de "El dia de la Marmota" lo ocupamos como broma local al decir "El dia de tu cumpleaños"... que cosas...
Saludos =)