¿Bailando por las calles?...mmmmmmmmm que note vean!...en estos tiempos, mostrar tanta alegría y buen humor abiertamente puede ser suficiente como para que te tomen por insana!!! jejejej...me alegra que lo hayas pasado tan bien!
No, Neo, no hubo ningún baile. Las primeras fotos son con una de esas esculturas vivientes: El hombre de las prisas. Se me ocurrió echarle unas monedas y me atrapó la mano, no me soltaba, jajaja. La verdad es que nunca olvidaré la magia que Barcelona me ha dejado en los ojos y en el corazón. Había más fotos, pero el duende tecnológico nos la jugó.
Se dice que hay maneras de mentir, pero la más repugnante de todas es decir la verdad ocultando el alma de los hechos. Porque los hechos son siempre vacíos, son recipientes que tomarán la forma del sentimiento que los llene". El Pozo. Juan Carlos Onetti
Hola, Tiberio, pasé por tu blog, aunque no he podido dejar comentario, lo intentaré otro día. Muchas gracias por tus palabras, intensas, que zarandean sin herir (Onetti es mucho Onetti). El alma de los hechos me pertenece, y no quiero compartirla. La verdad y la mentira que digan lo que quieran.
El Rincón de las Hadas
4 comentarios:
¿Bailando por las calles?...mmmmmmmmm que note vean!...en estos tiempos, mostrar tanta alegría y buen humor abiertamente puede ser suficiente como para que te tomen por insana!!! jejejej...me alegra que lo hayas pasado tan bien!
Queremos más fotos!
un abrazo.
No, Neo, no hubo ningún baile. Las primeras fotos son con una de esas esculturas vivientes: El hombre de las prisas. Se me ocurrió echarle unas monedas y me atrapó la mano, no me soltaba, jajaja.
La verdad es que nunca olvidaré la magia que Barcelona me ha dejado en los ojos y en el corazón.
Había más fotos, pero el duende tecnológico nos la jugó.
Muchos besos.
Se dice que hay maneras de mentir, pero la más repugnante de todas es decir la verdad ocultando el alma de los hechos. Porque los hechos son siempre vacíos, son recipientes que tomarán la forma del sentimiento que los llene".
El Pozo. Juan Carlos Onetti
Un abrazo.
Hola, Tiberio, pasé por tu blog, aunque no he podido dejar comentario, lo intentaré otro día.
Muchas gracias por tus palabras, intensas, que zarandean sin herir (Onetti es mucho Onetti). El alma de los hechos me pertenece, y no quiero compartirla. La verdad y la mentira que digan lo que quieran.
Un fuerte abrazo.
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